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7.1. Introducción


En primer lugar conviene distinguir entre cuatro conceptos, que si bien parecen similares, tienen significados distintos:

-          Formación: Formación hace referencia al número de jugadores que formarán en cada línea. Ejemplos: Una 4-4-2 tiene 4 defensas, 4 centrocampistas y 2 delanteros, mientras que una 3-4-3 tiene 3 defensas, 4 centrocampistas, y 3 delanteros.
-          Alineación: Son los 11 futbolistas que saltan al campo, en una formación determinada. Ejemplo: Repetir alineación en liga y en amistoso significa que se ha alineado a los mismos 11 jugadores en ambos partidos.
-          Táctica: Es un modo de comportarse de tus jugadores sobre el terreno de juego. En HT se puede elegir entre varias tácticas a poner en práctica durante los partidos. Más adelante profundizaré en ellas. Ejemplos: Jugar a presionar, al contraataque o atacando por las bandas son tres ejemplos de tácticas diferentes.
-          Estrategia: Es el conjunto compuesto por la formación, la alineación y la táctica (o ausencia de ella) mediante el cual pretendemos plantear el partido, con el objetivo de conseguir la victoria. Ejemplo: Mi estrategia para ganar al próximo rival es jugar con una formación 5-4-1 al CA (contraataque), y en la cual alinearé a unos jugadores concretos.

Al margen de esos conceptos, conviene hablar de dos más, relacionados con ellos:

-          Calificaciones: Son las valoraciones que aparecen en los reportes de los partidos, en la parte inferior. Evalúan el rendimiento de las diferentes zonas de tu equipo (mediocampo, defensas derecha, izquierda y central, ataques derecho, izquierdo y central). Son muy importantes, pues son las que deciden los partidos: el motor de partidos, como posteriormente se detallará, compara las calificaciones de ambos equipos, y junto a otros muchos factores (incluida una parte de azar) son las que determinan el resultado final del encuentro.
-          Órdenes individuales: Un jugador alineado en una posición determinada aporta con sus habilidades de una forma concreta a determinadas calificaciones. Ejemplo: Un defensa central aporta a las calificaciones de defensa con su nivel de defensa, y a la calificación de mediocampo con su nivel de jugadas. Las órdenes individuales consiguen que un jugador que ocupa una posición modifique parcialmente sus aportaciones a las calificaciones. Ejemplo: Un defensa central con la orden individual de “ofensivo” aporta, en comparación con no tener orden individual, en menor medida a las calificaciones de defensa con su habilidad de defensa, y en mayor medida a la calificación de mediocampo con su habilidad de jugadas.